Con una gran capacidad de reproducción y una genética muy compatible con la del hombre, es la reina en ensayos y estudios genéticos. Pero también puede convertirse en una plaga de grandes proporciones en poco tiempo. Su presencia puede ser sinónimo de falta de higiene.
Tan solo mide de 2 a 3 mm de largo, pesa de 0,8 a 1,5 mg y, como es normal en el resto de los insectos, tiene 6 patas, y divide su cuerpo en cabeza, torax y abdomen. Y como en el caso de los artrópodos, posee un exoesqueleto articulado. Tiene 2 grandes ojos compuestos de color rojo, que la dotan de una visión muy amplia y que son capaces de percibir luz de un gran número de puntos a su alrededor. Por su pequeño tamaño suelen ser confundidas con un mosquitos.
Drosophila melanogaster se alimenta de frutas en descomposición, donde las hembras depositan sus huevos, por lo que puede ser abundante en zonas de frutales. Más concretamente, su alimentación se centra en las colonias de levadura que crecen sobre uvas, manzanas, plátanos y otras especies de frutas dulces.
Tras ser el huevo fertilizado, que apenas mide medio milímetro de largo, tan sólo hará falta un día para que el embrión pase a ser una larva con aspecto de gusano, y que crecerá continuamente mudando en los días 1, 2 y 4 tras la eclosión. En el tercer estadio larvario, a los 2 días, mudará una vez más para convertirse en pupa, quedando inmovil.
A lo largo de los cuatro días que permanece en estado de pupa se culmina una metamorfosis que cambiará su cuerpo totalmente, dando lugar a un adulto con alas, con un abdomen redondeado y con un cuerpo más oscuro. Tan sólo 8 - 12 horas después de emerger de la pupa el adulto ya es fértil y la hembra ya es receptiva. El macho hace una especie de rito de media hora para después fecundar a la hembra, pudiendo esta almacenar el semen de varios machos que compiten en la fecundación.
La velocidad de su desarrollo, como es el caso habitual de los insectos, depende de las condiciones ambientales en las que se encuentra. A 25 ºC de temperatura, el paso de huevo a adulto se realizará en 10 días, mientras que a una temperatura de 20 ºC se tardarán 15 días. Con todo, el desarrollo de huevo a adulto puede llegar a completarse en tan solo 7 días y su vida total ronda los 30 días.
Las hembras pueden empezar a depositar sus huevos a los dos días de convertirse en adultas, y tienen capacidad como para depositar del orden de 500 huevos en los diez días siguientes.
Revolotea cerca de las frutas en proceso de fermentación de las que se alimenta, con un vuelo lento y generalmente en zonas de poca luz. La aparición de la mosca en interiores, y más concretamente en cocinas e industria alimentaria, suele tener que ver con falta de higiene, ya que hay fermentos de los que se están alimentando. Puede ser por presencia de frutas caidas tras algún mueble o de sus subproductos: derrames de zumos, salpicaduras de cerveza o, directamente, por la acumulación de materia orgánica y de humedad en algún lugar de dificil acceso y que no está siendo limpiado adecuadamente. También pueden depositar sus huevos en trapos caidos y olvidados que se han usado previamente en la limpieza, o verse atraidas por envases vacios de refrescos.
Su sola aparición es un indicativo de falta de higiene, por lo que ya no es que la mosca pueda transportar patógenos de un punto a otro, sino de que implica un transfondo de malas prácticas en los que a la limpieza e higiene se refiere.
La principal prevención frente a la mosca de la fruta es la limpieza. A ello habrá que sumar la correcta gestión de proveedores y de almacenamiento así como el control de temperaturas. Los tratamientos biocidas pueden ser de ayuda pero no servirán de nada si no se toma muy en serio y de forma continua el plan de limpieza del establecimiento. La solución no pasa sólo por el uso de insecticidas; es mucho más vital y, de hecho, imprescindible, el cuidado de la limpieza y de su programación, en la que deberán intervenir todos las personas que participan en las tareas de producción y gestión del establecimiento. La parte cultural y formativa, por tanto, es imprescindible.
La empresa de Gestión de Plagas pordrá ayudar participando en los planteamientos del plan de higiene y limpieza, y sólo deberá hacerse uso de biocidas en casos muy determinados siempre que, además, la normativa lo permita y el Responsable Técnico así lo vea conveniente dentro de una planificación integrada de gestión de plagas.
Se usa muy habitualmente en experimentación genética, ya que obstenta un reducido número de cromosomas (cuatro), un breve ciclo de vida (de 15 a 21 días) y aproximadamente el 60 % de los genes de enfermedades humanas que se conocen tienen una contrapartida en el genoma de la mosca de la fruta, y el 50 % de las secuencias proteínicas tienen análogos en los mamíferos. Por lo tanto, para muchas investigaciones pueden reemplazar a los humanos. Al ser capaces de reproducirse rapidamente, pueden estudiarse varias generaciones en espacios cortos de tiempo. Además, ya es conocido su genoma completo que consta de 13.600 genes.
Gracias a todas características, así como a la facilidad de cría, Drosophila fue adoptada como animal de experimentación genética a principios del siglo XX. Su utilización ha sido decisiva en el diseño y creación de nuevos fármacos así como en otros estudios como el de la formación de los vasos sanguíneos.